Geranios y medianeras
Contra la pared del fondo, la que daba a la avenida, apiló cajones de cerveza, vacíos. Creo que también alguno de sifones, esos viejos de hierro. Agarró la maceta del geranio, y comenzó su ascenso, no sin dificultad. La escala de cajones, no era muy estable y menos cargando una maceta. Ya en buena altura, apoyó la planta sobre la medianera. Miró un rato todo lo que se podía ver; tomó aire, mucho aire y gritó: "Mañana me como el geranio!!!". Declaró eso, como si fuese una verdad absoluta y vital para alguien; tal vez tratando de comprobar lo que ya sabía.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home